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Como habrás leido infinidad de veces, el rostro es el eje central de la apariencia de las personas. ¡Es cierto! Nuestra cara es una parte fundamental de su identidad, motivo por el cual, dentro de la cirugía facial, es precisamente la cirugía de mentón o mentoplastia es uno de los procedimientos más solicitados por pacientes para redefinir significativamente su perfil facial.
Aunque no lo creas, desde un punto de vista estético, no es sólo la boca, nariz u ojos lo que define la apariencia facial de una persona. De hecho, la barbilla o mentón es otra área importante del rostro, ya que marca una referencia del tipo de cara del paciente y que, además, rompe la transición entre la cara y el cuello.
Es por ello que, operación de mentón o cirugía de mentón en Madrid, es altamente aplicada en pacientes que desean una remodelación facial por completo. Sigue leyendo, que te contaremos todos los detalles sobre este procedimiento estético, el cual puede hacerse por diversos abordajes.
Tal como sucede en toda cirugía plástica, determinar cuándo es necesaria una mentoplastia, depende del diagnóstico del paciente, ya que existen muchas razones para realizarse una mentoplastia.
Sin embargo, en la mayoría de los casos, es un procedimiento auxiliar en la cirugía ortognática, con la cual se obtienen un mayor equilibrio facial, después de la recolocación de los huesos de maxilar y mandíbula.
Por otro lado, algunos especialistas suelen utilizar este procedimiento para corregir anormalidades del desarrollo de los huesos en la mandíbula, como la asimetría facial por barbilla sobresalida o prominente; así como también, en casos de agenesia congénita de la mandíbula, es decir, cuando el paciente nace sin una parte de la mandíbula.
Por tanto, bien sea por fines estéticos o de salud, la mentoplastia ósea sin dudas, coadyuva en la armonización de los rasgos faciales, aplicada principalmente cuando el mentón o barbilla del paciente es muy grande o pequeño, con relación a su rostro.
Finalmente, la operación de mentón también suele ser aplicada para la reconstrucción craneofacial después de un traumatismo facial o cirugía post-cáncer; así como también en el proceso de reasignación de género en el paciente.
En general, para determinar quiénes son candidatos/as a una operación de barbilla, será el médico tratante quién hará un análisis facial completo del paciente, haciendo un registro fotográfico desde varios ángulos, documentando la condición de la barbilla antes de la cirugía.
En su examen diagnóstico, hará un escáner cráneo-facial, para determinar las proporciones del rostro y cuál es el procedimiento más adecuado para equilibrar las facciones del paciente.
Por otro lado, en esta fase el médico debe detectar si existe algún problema oclusal y esquelético de la mandíbula, y en caso de que lo hubiere, determinar si la cirugía de mentón será suficiente para corregirlo.
En general, para estos casos es requerido aplicar un avance de la mandíbula, es decir, un procedimiento de la cirugía ortognática. De allí que el diagnóstico preciso de cada paciente para mejorar en forma efica su perfil facial.
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Para corregir el mentón y conseguir una mejor simetría en el rostro del paciente, sin dudas, debe hacerse una cirugía de barbilla, la cual puede hacerse por diversas vías o abordajes. Entre éstas se distinguen dos tipos de mentoplastia.
Independientemente de cual sea el procedimiento usado por el especialista para la corrección del mentón, cada paciente deberá someterse a algunas pruebas preoperatorias, para garantizar su seguridad antes de una mentoplastia. El análisis debe ser completo, incluyendo un electrocardiograma, analítica y radiografía.
El paciente, además, deberá informar al médico si está tomando algún tipo de medicamento, lo cual podría o no afectar al proceso de coagulación durante la cirugía. Por otro lado, el paciente fumador deberá abstenerse de este hábito tabáquico durante dos semanas antes y después de la cirugía de mentón, como mínimo.
Ahora bien, durante la fase postoperatoria, el paciente podría presentar inflamación y dolor en la zona, lo cual es normal después de una mentoplastia; por lo que se recomienda seguir las indicaciones del médico tratante. Entre éstas se encuentran:
Otro aspecto de gran interés para los pacientes, es precisamente el precio de la cirugía de mentón. En tal caso, debemos indicar que la remodelación de la barbilla por motivos estéticos no está cubierta por el seguro social; con excepción de las reconstrucciones de barbilla después de un traumatismo o por una deformidad genética. En tal caso, el precio de la cirugía dependerá de las condiciones del paciente y la complejidad del procedimiento.
Finalmente, si os preguntáis si es posible remodelar la barbilla sin cirugías, la respuesta es ¡Si! En estos casos, los especialistas realizan una mentoplastia sin cirugía, mediante la colocación de ácido hialurónico en la zona profunda cercana al periostio, con lo cual se puede simular una mayor proyección de la zona de la barbilla y destacando el perfil mandibular y el óvalo facial en pacientes con poca barbilla.
Para estos casos, el cirujano tratante estudiará en conjunto toda la zona, para dar el soporte más adecuado a los tejidos y sin producir cambios que alteren el aspecto natural de la cara. Vale destacar, que este tipo de tratamiento es de carácter temporal, ya que el ácido hialurónico es reabsorbible por el organismo y sus efectos no permanentes.
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